Educar para la Igualdad

  Mi centro educativo es un CEPER (Centro de Educación Permanente) al que acuden personas adultas a estudiar los distintos planes educativos que tenemos: Formación Básica, Interculturalidad, Preparación de la Prueba Libre para la obtención del título de Graduado en Educación Secundaria, etc. El rango de edad va desde los 18 hasta los 80 años. La procedencia es muy variada y heterogénea, destacando principalmente alumnado de origen árabe. Además, el centro se ubica en un barrio humilde en donde el desempleo está desgraciadamente muy presente en los hogares familiares. Estas últimas variables son las que hacen que actuaciones coeducativas sean más difíciles de llevar a cabo porque la perpetuación de los roles sexistas y los estereotipos de género están cimentados de manera sólida en buena parte de los alumnos y alumnas por su edad, procedencia y cultura. Esto hace que muchas de las actividades que se desarrollan desde el Plan de Igualdad de Género para trabajar la igualdad real y efectiv

El periodista Robert Guérin decía que el aire que respiramos está compuesto de oxígeno, nitrógeno y publicidad. Y es que la publicidad está presente en nuestro día a día de manera constante: en la televisión, en las redes sociales, en las vallas publicitarias o en las cuñas de radio. Es por ello, que junto con los medios de comunicación, tiene una responsabilidad social enorme (aunque no debemos olvidar cuál es su finalidad última). No obstante la publicidad debe reflejar los cambios que la sociedad experimenta y mostrar la riqueza de la diversidad en todas sus vertientes. ¿Qué anuncia? Este spot publicitario es de la empresa estadounidense Procter and Gamble. Una empresa que engloba marcas icónicas de productos que forman parte de nuestra vida diaria como Gillete, Dodot o Ariel. El spot en sí no anuncia un producto en concreto. Pretende rendir un homenaje a las madres (principales consumidoras de las marcas que integran esa empresa) en el marco de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.